Quisiera sentarme en una nube....

Sentarme en una nube, donde la brisa del mar me lleva al crepúsculo, al horizonte, a donde no hay nadie, no hay problemas, solo paz y gaviotas yéndose a la costa.
Sin las personas malas, sin preocupaciones, sin responsabilidades, solo yo con mi libreta escribiendo lo que me venga a la inspiración. Mirando al cielo, botando una lágrima de felicidad, de tranquilidad interna.

Sin presiones, sin tener que hacerme notar, que nadie me vea, que nadie sienta mi ausencia. Donde sólo las estrellas me miren y canten conmigo esa canción que tanto me gusta.

Escuchando la voz de mi madre diciéndome que me quiere, escuchando la voz de mi padre, diciéndome que soy el mejor. Oyendo reír a esas personas tan especiales, que desean lo mejor para mí, y yo deseando lo mejor para ellos…

Con el sonido de las olas, cantándome las buenas noches…

Quisiera sentarme en una nube y olvidarme de todo lo que me turba, olvidarme de mis temores.

Que al ver el amanecer las palmeras de la costa me Saluden.

Y al agarrar mis maletas y regresar a mi casa, decirle a mi familia que la amo, y decirles a mis amigos cuanto los quiero, y sentirme totalmente nuevo y limpio.

Como llegué al mundo, un recién nacido pero con 16 años de edad… Abrazando a mi abuela y diciéndole que volví, que la quiero y que ya me voy dormir, como hago todos los días…

Esta publicación va dedicada a todas esas personas, que están llenas de problemas, que sean felices, desahogando sus penas en una nube viajera al horizonte, al crepúsculo y donde el sol con esa luz que le da vida al mundo los hace desaparecer perdidos en su resplandor.